Javier Moncada Sequeira

Cuando decidí escribir este artículo, en conmemoración al Día Mundial del Agua, la primera idea que me vino a la mente, fue que tenía que buscar datos actuales que me permitieran evidenciar el acceso al agua en Nicaragua y la importancia del cuido de este recurso.

Así que iniciaré compartiéndoles que, durante el período comprendido entre los años 1990 y 2015, Nicaragua logró un aumento del 14 por cierto de la población con acceso a una fuente de agua mejorada, pasando del 73% al 87%, y permitiendo así, alcanzar la meta país del 86% establecida en los Objetivos del Milenio, según datos de Global Water Partnership en 2015.

Sin embargo, lograr que el país en su totalidad tenga acceso a agua potable sigue siendo un reto. Es urgente tener mayor inversión para la recuperación y el buen mantenimiento de los mini sistemas de agua colapsados; sobre todo, teniendo en cuenta que en los últimos años la demanda al acceso a agua potable ha aumentado. En 2011, existía un plan de cobertura activa de un 33.5% versus un 24.9% de sistemas de agua que necesitaban rehabilitación o un reemplazo definitivo, acorde a cifras del Plan Nacional de Desarrollo Humano, 2012-2016.

Además de un derecho humano básico, el agua es un elemento esencial que permite a los niños y a sus comunidades sobrevivir y desarrollarse plenamente. #DíaMundialDelAgua #WorldWaterDay pic.twitter.com/yq4sHb2Esn

— World Vision Nicaragua (@WorldVisionNic) March 22, 2019

También nos encontramos con el reto de la disminución de las fuentes de agua, afectadas por el cambio en el régimen de precipitaciones que sufre el país, la sobreexplotación, la contaminación y la reducción de las áreas forestales que afectan las zonas de recarga acuífera.

Si a ello sumamos que las afectaciones por el Cambio Climático son cada vez mayores en el país, reconoceremos que es fundamental invertir en la protección de las fuentes de agua. En 2015, Global Water Partnership compartió que la influencia del fenómeno de El Niño que afectó a Nicaragua desde el 2012 al 2015, evidenció la alta vulnerabilidad de la población al acceso a agua para el consumo humano a causa de la sequía.

Y podría continuar con más información o estadísticas sobre los retos en el área del acceso y protección de los recursos hídricos, pero es tiempo que representemos estas cifras con el impacto que tienen día a día, con situaciones cotidianas que enfrentan las familias que no tienen acceso a agua potable, las cuales, en su mayoría, están en las comunidades rurales de Nicaragua.

Cuando falta este recurso….

Imaginate que llegás a un pozo y no encontrás agua: ¿qué harías? ¿estarías decepcionado/a, no? ¿Cómo te sentirías si tuvieras sed y con urgencia necesitaras agua para tomar o cocinar y no tuvieses acceso a ella? ¿Cómo te sentirías al recibir a una visita en tu casa y no poder ofrecerle un vaso con agua?

¿Creés que serías capaz de levantar un balde con más de 15 litros de agua sobre tu cabeza y caminar horas para llegar a tu casa? Esta es una realidad que afecta a cientos de familias en el país y donde las mujeres, niñas y niños son los responsables de llevar agua a sus hogares. La escasez de agua que afecta a la niñez y los esfuerzos de esta para llevarla a sus hogares, también es un tema a recordar en este Día Mundial del Agua.

Las niñas y niños corren mayor riesgo de sufrir lesiones físicas y diversos tipos de abusos cuando viajan lejos de casa en búsqueda del agua, así mismo, cuando no tienen acceso a un baño o letrina privada en sus casas y escuelas.

El trabajo de World Vision en Nicaragua

A partir de esta realidad, World Vision Nicaragua con el programa Adaptación al Cambio Climático para la Seguridad Hídrica, mejor conocido como Agua Segura, aporta a mejorar el bienestar de la niñez, a través, del acceso al agua.

Con el programa, se desarrollan sistemas de agua comunitarios que aseguran el consumo de este recurso, pues hay muchas enfermedades que van desde la diarrea hasta la malaria, que pueden prevenirse con agua segura. Así mismo, se implementan metodologías que sensibilizan sobre la protección del agua y el cuido ideal de los recursos hídricos.

Bajo el programa también se habilitan servicios sanitarios y sistemas de agua en las escuelas para que las niñas, niños y adolescentes más vulnerables tengan acceso a agua segura y recursos higiénicos en sus centros escolares.

Trabajamos con gobiernos locales, la comunidad y otros socios que nos permiten enfrentar con mayor prioridad este reto.

Como implementadores, promovemos la participación de la niñez más vulnerable en la programación en todos los niveles, apoyándolos para asumir funciones de liderazgo en la gestión del agua en su comunidad y escuela.

Para llevar agua segura a cada niña, niño y su comunidad en Nicaragua necesitamos a todo el mundo. ¿Nos apoyás?

Para apoyar la implementación del programa Agua Segura podés donar a través de nuestra página web. ¡Tu donación puede cambiar la vida de toda una familia!

*El autor es Gerente del programa técnico Adaptación al Cambio Climático para la Seguridad Hídrica de World Vision Nicaragua.