Discipulado Cristiano es un proyecto de nutrición espiritual que busca que las niñas, niños, adolescentes y jóvenes (NNAJ) experimenten el amor de Dios y lo compartan con sus semejantes. Las niñas, niños, adolescentes y jóvenes son afectados en su desarrollo integral por contextos frágiles que les niegan la experiencia del amor de Dios y el de sus prójimos. El proyecto centra su atención en las barreras o factores que impiden que la niñez disfrute de una convivencia plena con sus familias y con Dios.

Este proyecto, impulsado por World Vision, se desarrolla en Asia, África y en 4 países de la región centroamericana: Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua, como una respuesta ante los problemas sociales, económicos, medioambientales y de salud, como la pandemia del COVID-19, que afectan la estabilidad y el desarrollo integral de las familias y comunidades.