Por Marcella Ballestero

Este 16 de noviembre se celebra el Día Internacional de la Tolerancia establecido por las Naciones Unidad. Como parte de este esfuerzo institucional, los países miembros de la UNESCO adoptaron en 1995 la Declaración de Principios sobre la tolerancia.

Esta declaración define la tolerancia como el respeto, la aceptación y el aprecio de la rica diversidad de las culturas de nuestro mundo, de muestras formas de expresión y medios de ser humanos, es decir, la tolerancia no es solo un ejercicio de respeto intelectual o frío, sino que requiere de acciones que tienen que ver con nuestros sentimientos: aceptación y aprecio.

En el planeta somos más de 7,300 millones de personas, eso quiere decir que existen millones de formas de pensar, sentir, creer, actuar; somos hermosamente diferentes en gustos y vocaciones. Qué aburrido sería un planeta donde todos somos iguales. ¿No te parece?

Tolerancia y diversidad son conceptos paralelos, no puede existir uno sin el otro.  La diversidad nos enriquece, nos presenta nuevos horizontes de pensamiento, imaginación y fascinación; nos abre la puerta a diferentes conocimientos. Por su parte la tolerancia nos permite conocer esos otros puntos de vista, practicar el respeto y la escucha activa, nos permite crecer en nuestra forma pensar y principalmente reconocernos a todos como interlocutores válidos.

La tolerancia no es una concesión, no implica pensar que los demás están equivocados y yo tengo la razón, no es solo tolerar un aspecto del otro pensando que la otra persona está equivocada; ni soportar las injusticias que limitan el ejercicio de los derechos humanos, sino que implica reconocer que los otros puntos de vista no son mejores o peores que los nuestros, sino simplemente diferentes.  ¡Aquí está el reto! En World Vision llamamos a esto relaciones de ternura, basadas en el respeto, la confianza, la horizontalidad y la igualdad, respondiendo a un principio bíblico que nos invita a amarnos los unos a otros, no con nuestra medida, sino con la medida de Jesús (Juan 13:34).

Que este día de la tolerancia nos brinde la oportunidad de celebrar la diversidad, la hermosura de la diferencia, la aceptación de lo diverso que nos hace más ricos y más sabios.  Que la tolerancia y el respeto en la diversidad sean los valores que nos lleven por el camino de la convivencia, y que el amor y la ternura sean los estandartes de nuestras relaciones entre nosotros y con los niños y niñas que nos rodean.

La autora es Oficial Regional de Compromiso Cristiano, World Vision América Latina y El Caribe