Autora: Azucena López
Coordinadora de Fe y Desarrollo en World Vision Nicaragua
El juego es un reflejo de la cultura y la sociedad. El niño y la niña juegan a lo que ven y, juegan lo que viven resignificándolo, por esta razón el juego es considerado como medio de formación cultural, puesto que inicia a los pequeños en la vida de la sociedad en la cual están inmersos.
El juego brinda la posibilidad de movilizar estructuras de pensamiento al preguntarse “qué puedo hacer con este objeto” y es a partir de ello, que desarrolla su capacidad de observar, de investigar, de asombrarse, de resignificar los objetos y los ambientes, de crear estrategias entre otros. Además, el juego brinda la oportunidad inigualable al adulto de estar con el niño y la niña, de construir un vínculo, de reconocer a través de sus gestos, las expresiones de alegría, tristeza, inconformidad y asombro.
Es por ello, que en este artículo proponemos diversas actividades para que niños, niñas, padres, madres y responsables interactúen en un ambiente lúdico que propicie la nutrición espiritual, a través del afecto, el amor, el descubrimiento de sí mismos, de los demás, la contemplación de la naturaleza, el reconocimiento de que todos y todas han sido creados a imagen y semejanza de Dios.
La creación y yo
Objetivo del juego: Fortalecer la espiritualidad de los niños y niñas a través de la conexión del niño, niña con la naturaleza, y por medio del reconocimiento que todo lo que existe incluyendo al ser humano, ha sido creado por Dios.
Materiales necesarios: Lápices, hojas de papel, crayones o lápices de colores.
Orientaciones:
- Explicar que la actividad consiste en dibujar la naturaleza, a sí mismo/a y a su familia.
- Cada participante tendrá 10 minutos para hacer su dibujo.
- Permitir que los niños y niñas expliquen qué dibujaron y qué les encanta de la naturaleza.
- Brindar aplausos después de la presentación de cada niño o niña.
- Leer Génesis 1:1 y Génesis 1:26 y explicar que la tierra, los ríos, las montañas, los mares, los animales, las plantas, etc., los niños y las niñas, los padres, las madres, los amigos y amigas fueron creados por Dios; y el mundo es nuestra casa.
- Dar espacio para que las niñas y los niños expresen sus reflexiones acerca de la creación de Dios.
La ronda del cariño
Objetivo: Motivar a los niños y las niñas a expresar su afecto a algún familiar.
Materiales necesarios: Lápices, hojas de papel, crayones o lápices de colores, figuras de pastas (codos, conchas, estrellas, letras), revistas, tijeras y materiales disponibles en casa.
Orientaciones:
- Cada miembro de la familia elabora una tarjeta que dedicará a una persona de la familia o a toda la familia: Mamá, papá, hijo, hija, hermano, hermana, abuelo o abuela.
- Cada niño y niña escribirá en su tarjeta un mensaje cariñoso para la persona o familia.
- Cuando finalizan, cada persona muestra su tarjeta y expresa su cariño.
- Hacer una galería con todos los dibujos, en la pared o una pizarra.
- Leer 1 Juan 3:23 “Y este es su mandamiento: que creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo, y nos amemos unos a otros como Él nos ha amado”.
Quién soy
Objetivo: Fortalecer la identidad de las niñas y los niños y de los miembros de la familia, mediante el autoconocimiento como hijas e hijos creados a imagen de Dios.
Materiales necesarios: Lápices, hojas de papel, crayones o lápices de colores, tijeras y materiales disponibles en casa.
Orientaciones:
- Cada miembro de la familia dibuja una silueta de su cuerpo.
- Cada participante tendrá 10 minutos para hacer su dibujo y responder la pregunta: ¿Quién soy?
- Adentro y fuera de la figura debe escriben aspectos personales como: Nombre, nacionalidad, sexo, padre, madre o tutor y edad. Puede dibujar o poner figuras del animal con el que se identifica, la fruta que más le gusta, su color preferido y su comida preferida.
- Cada participante escribe su nombre en forma vertical y con cada letra del nombre, una cualidad que lo describa, formando un acróstico.
- Al finalizar cada participante comparte su dibujo y todos los aspectos de su identidad.
- Leer Génesis 1:27: “Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó”.
- Comentario: La definición del ser humano como “imagen y semejanza de Dios “lo pone en un lugar muy diferente al de los otros seres. Solamente el ser humano lleva en sí esa imagen de Dios, como reflejo de su hacedor.
Esto es importante para la fe, porque significa que todas las personas deben ser tratadas con dignidad. El valor de las personas se deriva, no de la posición social que tiene o por los recursos económicos que posee, sino de la dignidad y el valor que Dios le ha dado, al crearlas a su imagen y semejanza.
Tiempo de películas basas en la fe
Objetivo: Conocer historias bíblicas de forma interactiva.
Materiales necesarios: Dispositivo con conexión a internet; televisor, reproductor DVD y disco con la película seleccionada.
Orientaciones:
- Cada miembro de la familia toma un espacio en el lugar donde se verá la película.
- Definir preguntas a realizar después de la película para despertar el compromiso de los espectadores.
- Ver la película sin interrupciones.
- Tomar un momento para que cada integrante de la familia exprese sus emociones, sentimientos y/o preguntas sobre la película.
- Realizar las preguntas y aplaudir cada participación.
- Leer el pasaje bíblico donde se aborda la historia bíblica.
Comentario: La película debe ser seleccionada tomando en cuenta la edad de las niños, niños y/o adolescentes; pueden ser películas caricaturizadas.
Tiempo de devocionales familiares
Objetivo: Fortalecer el crecimiento espiritual y la unidad familiar.
Materiales necesarios: Biblia e Himnario.
Orientaciones:
- Cada miembro de la familia toma un espacio en el lugar de la casa donde se hará el tiempo devocional.
- Cada miembro de la familia selecciona una alabanza y petición de oración.
- Se define un momento para cantar y llevar una breve lectura bíblica.
- Posterior a la lectura bíblica cada miembro de la familia opina o comenta lo percibido.
- Se entrega el momento con un tiempo de oración. Se pueden incluir peticiones por personas o situaciones ajenas al hogar.
Comentario: El tiempo de cada devocional puede ser de 30 minutos. La lectura bíblica puede basarse en un pasaje donde se aborda el amor, fidelidad y/o cuidado de Dios.
13 abril 2020
Son de bendición para mi vida, Dios les permita llegar a más vidas para que conozcan de su gran labor.
13 abril 2020
Gracias por ser una fuente de conocimiento y ayuda para nosotros como padres.